Con más de 145 mil casos de coronavirus, Venezuela cumple un año entre encierro y relajo: LPL
Este 13 de marzo, se cumplió un año desde que la pandemia por coronavirus llegó a Venezuela. Actualmente, se registran más de 145 mil casos de covid-19, según la Administración de Maduro y expertos critican «el relajo» que existe en momentos en que se aprieta y suelta sin tomar la prevención desde diagnósticos certeros y sin reforzar la protección colectiva.
Un reporte de La Prensa Lara, indicó que el coronavirus se ha convertido en una «prueba de fuego», ya que no existe una plataforma sólida desde el sistema público de salud. «Esto terminó exponiendo al personal sanitario y queda reflejado en las 354 víctimas fatales, con deficiencias que empiezan por la falta de dotación de implementos de bioseguridad y demás fallas de base».
«Mientras se abren o cierran las compuertas, sin el debido seguimiento para ser más estrictos en la atención hospitalaria y el rigor de las medidas básicas como uso correcto del tapabocas, lavado frecuente de manos y distanciamiento. Pero la realidad, es que la mayoría de la ciudadanía solo relaciona el uso de la mascarilla como un requisito para el acceso a algún establecimiento o entidad gubernamental».
Por su parte, Douglas León Natera, miembro de la Federación Médica Venezolana, calificó de «invento» el método 7+7 de Nicolás Maduro. «Intenta fraccionar el tiempo del virus, manteniéndolo encerrada por una semana y luego como si no pasara nada».
Todo sin la rigurosidad de las medidas para garantizar la salud y a sabiendas del avance agresivo de esta pandemia, incluso con los primeros casos de la variante brasileña detectados en febrero en la región central. Un vaivén desatado desde el 17 de marzo de 2.020 cuando el ejecutivo nacional anuncia la cuarentena nacional y se prolonga por 5 meses consecutivos hasta que en junio implementan los esquemas de flexibilización. Medidas que empezaron con el 5×10 al permitir 5 días de trabajo y 10 de descanso, pero luego se prolongó en el 7 + 7, que alterna la semana de flexibilización y cuarentena radical.
Señala el manejo de la pandemia como un «circo», al referirse a las improvisaciones y en «una especie de guerra presidencial, con los científicos de Miraflores que hasta ofrecieron unas gotas milagrosas, que fue un excedente de Cuba y con el abuso de identificarlas a nombre del Dr. José Gregorio Hernández. ¿Será para curarse con fe?».
León se ubica en enero de 2.021 a las gotas Carvativir, señaladas como milagrosas por el propio jefe de Estado y cuando ya se tenía el precedente en octubre, de las luces para neutralizar el Covid19 con la molécula DR10. Esperanzas en un tono muy afirmativo que sólo quedaron en un discurso presidencial.
Para Edgar Capriles, experto en economía de la salud, las «cifras oficiales sigan siendo más bajas que las reales». Y señaló la debilidad en los diagnósticos, ante el pánico de pacientes que temen ser atendidos en centros asistenciales públicos, ante el forzado confinamiento en recintos que no están acondicionados o son recluidos entre casos críticos, con el riesgo de una alta concentración viral que termina complicando al paciente. «Esto explica que no se cuentan aquellos infectados con atención domiciliaria o quienes hacen el esfuerzo para costear los elevados gastos de hospitalización en clínicas, cuyas cuotas diarias oscilan desde $ 2.000».
Asimismo, criticó que no hay autoridad sanitaria, sino una vocería poco creíble.
«No aparece contradiciendo a esta vocería con información epidemiológica», denuncia de quien debería tener el soporte de las universidades, las academias, comunidad científica, gremio médico y hasta algunas organizaciones no gubernamentales que presenten apoyo. Ante la incertidumbre de la posibilidad de los subregistros desde la data oficial sobre el coronavirus, Jaime Lorenzo, presidente de Médicos Unidos de Venezuela, mira hacia atrás y se ubica en mediados de febrero de 2.020, cuando la OMS temía la imposibilidad de realizar los estudios masivos a partir del estándar de pruebas PCR.
Una diatriba que se estanca en la realidad venezolana entre la carencia de información epidemiológica y la clínica del paciente. Un reflejo que comprometía aún más la inflamación del pulmón y solo se relaciona a un cuadro de neumonía, asociada a Covid 19. «Hay más volumen de cuerpos cremados, pero sigue la falla de la información», criticó.
Con la exactitud de los casos, se puede verificar la evolución certera del virus, considerando todos los cambios que ha implicado. Variantes que siguen acechando y el virus cobra más fuerza, sin ningún medicamento que neutralice esta pandemia. La respuesta se concentra en el plan de vacunación, pero desde el efecto de rebaño.
«Las enfermedades no pueden tomarse desde la óptica partidista, porque no distinguen y atacan a todos por igual. Sin decisiones que terminen en burla a los ciudadanos», reprochó.