Agencia AP: Demócratas presionan a Biden para que permita el intercambio de diésel con Venezuela

Un senador estadounidense insto este martes a la administración de Joe Biden a que levante la prohibición de intercambio de diésel con Venezuela, uniéndose así a la presión de varios demócratas y cooperantes que afirman que las sanciones agravan la crisis humanitaria en el país.

El anterior Gobierno de Donald Trump imposibilitó en noviembre que empresas no estadounidenses pudieran intercambiar gasoil por crudo con Pdvsa. Tales canjes no habían sido incluidos en las sanciones estadounidenses debido al rol que cumple el diésel en el transporte público del país, pero también para que los agricultores trasladen alimentos a los mercados.

Chris Murphy, senador de Conneticut y miembro demócrata del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, destinó una carta a Antony Blinken para pedir el cese de esta «política equivocada». Murphy Señaló que permitir inmediatamente el intercambio de gasoil «proporcionaría un alivio vital a millones de venezolanos».

«La prohibición no ha creado ninguna influencia política real con Maduro, que fue capaz de maniobrar alrededor de las sanciones unilaterales, y en su lugar amenaza con empeorar gravemente la situación humanitaria ya grave en el país», subrayó Murphy en la misiva a la cual accedió la agencia AP.

Ni la administración de Biden ni el Gobierno interino de Juan Guaidó han manifestado si respaldan el levantamiento de la prohibición de gasoil.

Anaqueles vacíos

Para el analista financiero y director de Econométrica, Henkel García, el gran riesgo de la escasez de gasoil si se prolonga en el tiempo es que esta tenga un «efecto inmediato» y sea el de «ver anaqueles vacíos» de nuevo.

«Ya lo estamos viendo, sobre todo en quesos frescos, ya esa cadena de distribución está siendo afectada y algunas verduras y vegetales están teniendo problemas para llegar a las distintas ciudades», explica.

García alerta de que «vamos a ver cómo, poco a poco, de manera progresiva, va a ser cada vez más difícil conseguir ciertos productos», en algunos casos, e «intermitencia» en el abasto de otros.

«Si se llegase a complicar, lo que vamos a ver es a gente que no se va a poder mover porque el transporte público no va a poder funcionar y anaqueles, literalmente, vacíos porque los productos no pueden llegar», subraya.