Un camión de basura como ambulancia
El video se hizo lógicamente viral.
No hay modo alguno de atender cualesquiera emergencias con prontitud y eficacia. Y tampoco adivinamos un mínimo de dignidad para soportar la desgracia.
No hay ataúdes ni carrozas fúnebres y menos ocasión para la honrosa cremación. Hay testimonios del traslado de un cadáver encapsulado en viejas sábanas sobre una carrucha de albañilería.
El Estado depredador nos impone tan espeluznantes escenas apara darle al infortunio un definitivo visado de normalidad. Sobrevivir es aceptar y hacerse parte real o virtual de esas escenas muy antes inimaginables.
Quizá lo acaecido es inversamente proporcional a lo vivido en la profunda intimidad de los clanes del poder. Un festín ilimitado de placeres que debe rayar en el morbo del disparate escatológico.