Álex Saab agradece a Maduro por su apoyo «inquebrantable» y espera verlo «muy pronto»: Semana
Mientras en EEUU se espera la extradición de Álex Saab, señalado de ser el testaferro de Nicolás Maduro, este rompió silencio y exigió nuevamente se respete su condición de diplomático, estatus del que no goza de acuerdo a la legislación estadounidense, según fiscales de Miami.
Es justo esta una de las últimas cartas que se ha jugado el régimen de Maduro para proteger a Saab y evitar su envío a Estados Unidos donde tendría que contar los más oscuros secretos régimen, su forma de financiarse, los cambios de oro por petróleo y el enriquecimiento catapultado en la política del Gobierno de Venezuela a partir de la entrega gratis de alimentos, en ocasiones en mal estado, en el modelo denominado Claps, que era manejado por Saab.
“Quiero agradecer al presidente Maduro y a su equipo por su apoyo inquebrantable en la búsqueda de mi condición irrefutable de diplomático y leal servidor de la República Bolivariana de Venezuela. Mi caso legal es sólido y se hace aún más fuerte con su apoyo. ¡Espero agradecérselo a todos en persona muy pronto!”, dijo Saab a través de un comunicado.
En su aparición Saab hizo referencia una serie de manifestaciones que tuvieron lugar en las calles de Caracas, Venezuela, en donde reclamaban su libertad. “Queridos amigos y camaradas: No encuentro palabras para expresar lo humilde y agradecido que estoy por vuestro apoyo y cariño. Aunque no he podido ver las retransmisiones de vuestras protestas, tengo entendido por mi familia que acudisteis cientos de miles a denunciar mi detención ilegal, la extralimitación judicial por motivos políticos y la hegemonía de los Estados Unidos”, dijo Saab.
Por otro lado, Saab con el apoyo de Venezuela despliega todo su arsenal jurídico tratando de evitar la extradición. Según pudo establecer SEMANA, su defensa, a través de Geraldo Almeida, alega que este caso tiene lagunas que han llevado a las instancias judiciales a “ignorar la ciencia jurídica”.
El argumento de la defensa es que la detención domiciliaria de Saab, en la práctica es una “mera restricción de la libertad. Cuando toda la doctrina afirma que la obligación de permanencia en la vivienda constituye una medida coercitiva privativa de la libertad, el Tribunal Supremo de Justicia entiende lo contrario, haciendo un mero juego de palabras: la detención en el establecimiento penitenciario constituye una privación total de la libertad, mientras que la obligación de permanencia en la vivienda constituye una mera restricción de la libertad. Dejó de estar detenido”, señala su abogado.