La encuesta ENCOVI 2020 estima que el 96% de los hogares venezolanos presenta pobreza de ingresos, y cataloga a Venezuela como el país más pobre de América Latina, con un ingreso de promedio diario de 0,72 dólares estadounidenses cuando lo que requiere una persona para comer saludable son 3,98 dólares diarios.
A Venezuela la sostienen las remesas y no las exportaciones, condenó Olalquiaga
El vicepresidente de la Asociación de Industriales Latinoamericanos, Juan Pablo Olalquiaga, reprochó este jueves que la economía venezolana se sostiene por las remesas y no por las exportaciones. Subrayó que el país lleva 8 años de decrecimiento económico y se han reducido sus capacidades comerciales.
Ecoanalítica informó que en 2019 se llegó a un récord de 3.500 millones de dólares en remesas en Venezuela, y que en 2020 estimaban recibir 1.500 millones de dólares, con lo cual se proyecta una caída del 55% con respecto a los años anteriores y un 64% de las remesas que se esperaban.
Al respecto, Olalquiaga sostiene que lo que principalmente entra a Venezuela es producto de los migrantes, lo que es común en países latinoamericanos. «Venezuela no tiene capacidad de sostenerse por exportaciones, esto se traduce en que es una economía extraordinariamente frágil porque priva la capacidad de sostenerse», dijo en entrevista en Unión Radio.
Criticó que la Administración de Nicolás Maduro no desarrolle políticas públicas que estimulen y desarrollen la educación ni la investigación como hacen otros países. «El mundo busca investigación en medio de la pandemia, la inteligencia artificial para prolongar la vida e inversiones como desarrollo de alimentos, pero vemos como enero de 2021 comienza con el congelamiento de las matrículas de las universidades privadas y con profesores que protestan porque ganan 3 dólares».
Destacó que no se puede hablar de «repunte» o estabilización porque los venezolanos siguen migrando a otros países por la falta de oportunidades. «Se está condenando la educación e inhibiendo la educación, por eso los jóvenes se siguen yendo al exterior y los que quedan tienen pocas oportunidades de competitividad. Están condenando a la población a la pobreza crónica porque este entorno no nos permite tener confianza».
«Hay otros países que son autoritarios como China pero privilegian el desarrollo y la educación», contrastó.