Pompeo visita Sri Lanka y Maldivas para abrir frente a la «depredadora» China
Colombo/Malé, 28 oct (EFE).- El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, visitó este miércoles Sri Lanka y Maldivas, donde se mostró ante sus socios isleños como un «amigo» frente al «depredador» Partido Comunista Chino, al tiempo que abogó por un Indo-Pacífico «libre y abierto» lejos de la influencia china.
«Vemos en los malos acuerdos, las violaciones de la soberanía y la ilegalidad en tierra y mar que el Partido Comunista Chino es un depredador, (mientras) Estados Unidos viene de una manera diferente, venimos como amigos y como socios», subrayó Pompeo durante una intervención en Colombo junto a su homólogo Dinesh Gunawardena.
Pompeo afirmó que considera a Colombo como «un faro para un Indo-Pacífico libre y abierto», repitiendo así el guión contra la injerencia china que le ha acompañado en su gira asiática, que comenzó el lunes en la India y siguió hoy con actos oficiales en Sri Lanka y Maldivas antes de partir hacia Indonesia.
En su comparecencia en Malé en compañía del ministro de Exteriores maldivo, Abdulla Shahid, el jefe de la diplomacia estadounidense volvió a remarcar el interés de EE.UU. en respetar la soberanía y hacer amistades, frente al «comportamiento ilegal y amenazante» de China.
Una actitud que Pompeo resumió en la «militarización ilegal» del mar del Sur de China por el Ejército Popular de Liberación, las «invasiones a las zonas económicas de sus vecinos» y la destrucción del medio ambiente por parte de las «empresas estatales chinas».
Deudas con China
Como ejemplo de estas supuestas malas prácticas está el endeudamiento de Sri Lanka, que en la última década recibió préstamos de China por valor de miles de millones de dólares para el desarrollo bajo el Gobierno de los hermanos Rajapaksa.
Pekín ve a Sri Lanka como un vínculo fundamental de su ambicioso proyecto comercial de la «Nueva Ruta de la Seda», que apoya con el impulso de infraestructuras claves como aeropuertos, carreteras y puertos, aunque algunas voces critican que esos préstamos son inviables, una trampa para que caigan endeudados.
Por su parte Maldivas ha ido reconstruyendo su alianza con Estados Unidos tras la victoria en los comicios de 2018 del presidente maldivo, Ibrahim Mohamed Solih, que se había mostrado muy crítico con la estrecha relación que mantuvo con China su predecesor, Abdulla Yameen.
Durante el Gobierno de Yameen, Pekín desembolsó grandes cantidades de dinero para el desarrollo de infraestructuras portuarias y de transporte en el archipiélago.
Sri Lanka y Maldivas, más comedidos
Pero ante la marcada retórica contra China del representante estadounidense, sus homólogos isleños se mostraron más comedidos en sus declaraciones sobre Pekín, ante los fuertes vínculos económicos que aún les unen al gigante asiático.
«Sri Lanka es un país neutral y no alineado comprometido con la paz (…) y en estos principios esperamos continuar nuestras relaciones con Estados Unidos y otros países», dijo el ministro de Exteriores esrilanqués en la rueda de prensa con Pompeo.
Gunawardena sí incluyó en su intervención guiños a los intereses de Estados Unidos en la región, al destacar que Sri Lanka está comprometida a «mantener la libertad de navegación en los mares».
El ministro de Exteriores maldivo también aseguró por su parte que «una asociación más sólida entre EEUU y Maldivas es fundamental para promover la seguridad en el Océano Indico», aunque como amenazas no citó a China, sino la lucha contra el terrorismo y la radicalización de la población en este país de mayoría musulmana.
Durante la visita ayer de Pompeo a Nueva Delhi, Estados Unidos y la India firmaron un acuerdo militar de intercambio de datos por satélite que permitirá a la India obtener una mayor precisión para el manejo de sus misiles o drones, un anuncio que llegó en medio de las fuertes tensiones fronterizas con Pekín en el Himalaya.
La escala ahora en Indonesia, que marca el fin de esta intensa gira asiática antes de las elecciones presidenciales estadounidenses la próxima semana, supondrá presumiblemente el colofón de Pompeo a un viaje en el que la «amenaza» de China estuvo siempre presente. EFE