Bloomberg: Funcionario de Trump se reunió con Jorge Rodríguez en México para negociar salida de Maduro
Un influyente funcionario de la Administración de Donald Trump se reunió en secreto con Jorge Rodríguez en la Ciudad de México, en septiembre, para tratar de negociar la salida “en paz” de Nicolás Maduro del poder, según publicación de Bloomberg.
La agencia de noticias indica que la reunión entre el Richard Grenell, exdirector interino de Inteligencia Nacional de Estados Unidos y embajador en Alemania, y Jorge Rodríguez, por Venezuela, fue confirmada por cuatro personas familiarizadas con el tema.
El Secretario de Estado, Michael Pompeo y el resto del Departamento de Estado no estaban al tanto del encuentro, hasta después que concluyó.
Bloomberg señaló que Grenell buscaba discutir la salida de Maduro, sin embargo, no aclaró si Jorge Rodríguez y el propio mandatario venezolano, estaban abiertos a esa posibilidad.
“En cualquier caso, las conversaciones no tuvieron éxito”, dijeron las fuentes consultadas.
El presidente Donald Trump ha tratado de lograr una serie de logros en política exterior antes de las elecciones del 3 de noviembre, incluyendo acuerdos de paz en Oriente Medio, retirada de tropas de varios países y la liberación de rehenes estadounidenses que se cree que están retenidos en Siria.
Los funcionarios de EE.UU. dieron cuentas contradictorias sobre si el viaje de Grenell para reunirse con Rodríguez fue autorizado, aunque dos personas familiarizadas con el asunto dijeron que el asesor de seguridad nacional de Trump, Robert O’Brien, lo firmó con la bendición del presidente. Pero Pompeo y el enviado del Departamento de Estado para Venezuela, no supieron del viaje hasta que terminó.
Rodríguez se negó a hacer comentarios, al igual que los portavoces del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca y el Departamento de Estado.
Las personas familiarizadas con las conversaciones de Venezuela pidieron no ser identificadas porque nunca fueron anunciadas.
La campaña Trump ha estado cortejando a los venezolanos que huyeron de su país y se hicieron ciudadanos estadounidenses. Muchos viven en Florida, un estado campo de batalla donde las elecciones a menudo se deciden por márgenes estrechos.
Pulse aquí para leer la nota original, en inglés, en Bloomberg