Azerbaiyán denuncia ataques armenios contra importantes objetivos civiles
Bakú/Tiflis, 4 oct (EFE).- Armenia atacó en la mañana de este domingo varios objetivos civiles, incluyendo las ciudades de Tartar, Horadiz y Ganja, la segunda en importancia de Azerbaiyán, denunció el Gobierno de Azerbaiyán.
«Armenia lanzó cohetes contra Ganja. Las fuerzas armadas de Armenia atacan deliberadamente las ciudades de Tartar y Horadiz con artillería pesada y sistemas de cohetes. Además fueron objeto de ataques de cohetes poblados en las regiones de Fuzuli y Jabrail», declaró el asesor de la presidencia azerbaiyana, Hikmet Hajiyev.
Según el alto funcionario azerbaiyano, «a consecuencia de estos ataques varios civiles han fallecido o recibido heridas».
Hajíyev indicó que durante las últimas jornadas Armenia ha lanzado contra zonas densamente pobladas más de 10.000 proyectiles de diversos tipos, causando graves daños a más de 500 viviendas.
E incidió en la necesidad de distinguir entre militares y civiles durante la confrontación.
«Los ataques armenios de gran envergadura contra poblados azerbaiyanos sin necesidad militar de ningún tipo no son casuales. Los ataques sistemáticos de Armenia son un testimonio de que se trató de un plan preparado de antemano e incluido en el programa de preparación combativa del Ejército armenio», afirmó.
Las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán responden «adecuadamente» con el fin de aniquilar los puntos de fuego enemigos y garantizar la seguridad de la población civil, indicó.
En tanto, la Fiscalía General de Azerbaiyán anunció la muerte de otros dos civiles de la ciudad de Beylagan a consecuencia de los enfrentamientos de la víspera, con lo que el número de civiles fallecidos durante la contienda ascendió a 22.
El conflicto armenio-azerbaiyano se remonta a los tiempos de la Unión Soviética, cuando a finales de la década de losochenta el territorio azerbaiyano de Nagorno Karabaj, poblado mayoritariamente por armenios, pidió su incorporación a la vecina Armenia, tras lo cual estalló una guerra que causó unos 25.000 muertos. EFE