Irán reclama a la CIJ que detenga las sanciones de EEUU: «Son injustificadas»
La Haya.- Irán reclamó este miércoles a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que se declare competente a la hora de juzgar a Estados Unidos por violar supuestamente un tratado internacional cuando, en mayo de 2018, se retiró del pacto nuclear y reimpuso las sanciones contra Teherán.
El representante de Irán ante el alto tribunal de la ONU, Hamidreza Oloumiyazdi, hizo un llamamiento a los jueces para que intervengan porque, según dijo, «el carácter ilícito de las medidas coercitivas unilaterales (de Estados Unidos) se han dirigido injustificablemente contra Irán, su población y su economía».
Aseguró que la reimposición de sanciones ha tenido como consecuencia una caída del 95 % de las exportaciones de petróleo de Irán en el mercado internacional.
Otros sectores, como los de la banca, las finanzas y los servicios de aviación, así como la industria metalúrgica y naviera, «se han visto severamente dañados», explicó Oloumiyazdi.
Las medidas de Washington «fueron diseñadas con pleno conocimiento sobre el severo daño y el sufrimiento que traerían al pueblo iraní, al comercio de Irán y a su economía», e implementadas «sin tener en cuenta el Tratado de Amistad, Relaciones Económicas y Derechos Consulares de 1955», añadió el representante del país persa.
Teherán alega que la supuesta violación de este convenio bilateral, firmado cuando ambos Estados mantenían buenas relaciones, es razón suficiente para que la CIJ se declare competente para juzgar el caso.
La salida de Estados Unidos del pacto nuclear
El litigio judicial tiene como origen la salida unilateral de Washington del pacto nuclear con Irán, firmado en 2015 y que contó con la participación de Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania.
Dicho acuerdo impuso límites e inspecciones al programa atómico de Irán a cambio del levantamiento de las sanciones, que penalizaban a las compañías internacionales que hacían negocios con Teherán.
En mayo de 2018, Washington se retiró del acuerdo y reimpuso las sanciones, a pesar de que el Organismo Internacional de la Energía Atómica confirmó que el país persa lo estaba implementando en los términos establecidos.
El pasado lunes, Estados Unidos argumentó que el levantamiento inicial de las sanciones «reforzó la disposición de Irán de involucrarse en otras actividades amenazadoras» fuera del ámbito nuclear, según dijo el representante de Estados Unidos ante la CIJ, Marik String.
Entre esas acciones estarían «el suministro de armas» a grupos considerados terroristas por Washington o «el desarrollo y la proliferación de tecnología de misiles balística» por parte de Irán, indicó el representante estadounidense, que pidió al tribunal internacional que se considere incompetente y rechace estudiar el caso.
Oloumiyazdi calificó hoy estas alegaciones como «excusas» y dijo que el objetivo de Washington a la hora de pedir a la CIJ que estudie su eventual jurisdicción es retrasar que los jueces examinen el fondo del asunto.
El tribunal decidirá si se declara competente hacia finales de año
La cuestión principal que deben dirimir los magistrados, cuya decisión se dará a conocer en los próximos meses, es si el tratado de 1955 constituye base suficiente para declararse competentes.
Uno de los argumentos legales más repetidos por los abogados de Washington fue que ese convenio bilateral se ocupa única y exclusivamente del comercio entre Irán y Estados Unidos.
Es decir, las medidas tomadas por Washington contra empresas de terceros países por comerciar con Teherán estarían fuera del alcance del tratado, por lo que parte de la denuncia carecería de fundamento.
El abogado de Irán, Vaughan Lowe, respondió hoy que «Estados Unidos no puede eludir su responsabilidad», porque esos terceros países «han sido instrumentos» para «implementar las medidas contra Irán».
En una decisión anterior tomada el 3 de octubre de 2018, la corte ordenó a Washington que levantase de forma cautelar algunas de las sanciones, como las relacionadas con «la libre exportación a territorio de Irán de bienes relacionados con necesidades humanitarias», productos agrícolas y alimenticios o servicios esenciales para la seguridad de la aviación civil.
Estados Unidos respondió ese mismo día cancelando unilateralmente el tratado de 1955, aunque este paso no tiene efectos jurídicos inmediatos porque la denuncia de Irán fue presentada antes.
En caso de que el alto tribunal de la ONU asuma la competencia del caso, la sentencia sobre el fondo del asunto tardará años en hacerse pública.
La CIJ trata litigios entre países y la aplicación de sus decisiones depende de la voluntad de los Estados y, en última instancia, del Consejo de Seguridad de la ONU, donde Estados Unidos tiene derecho de veto. EFE