Pompeo: Elecciones en Bielorrusia no fueron ni libres ni justas
Estados Unidos se expresó este lunes «profundamente preocupado» por el desarrollo de las elecciones en Bielorrusia, donde la oposición se ha negado a reconocer el triunfo del presidente del país, Alexandr Lukashenko, y consideró que «no fueron ni libres ni justas».
«Las graves restricciones al acceso de los candidatos a la votación, la prohibición de observadores locales independientes en los colegios electorales, las tácticas de intimidación empleadas contra los candidatos de la oposición y las detenciones de manifestantes pacíficos y periodistas empañaron el proceso», señaló el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un comunicado.
La posición la ratificó en una rueda de prensa la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, quien, al igual que Pompeo, instó al Gobierno de Bielorrusia «a respetar el derecho de las personas a reunirse pacíficamente y a abstenerse del uso de la fuerza».
La Comisión Electoral Central de Bielorrusia informó este lunes que Lukashenko, en el poder desde 1994, ganó los comicios con el 80,23 % de los votos.
Svetlana Tijanóvskaya, candidata de la oposición unificada, se negó a reconocer los resultados y llamó este lunes a «los que creen que su voto ha sido robado a no quedarse callados».
La líder opositora había instado el domingo a los bielorrusos, manifestantes y Policía a «cesar la violencia».
Una vez se conocieron los sondeos oficiales que daban cuenta de la victoria del actual presidente, estallaron protestas antigubernamentales que solo en la noche del domingo dejaron unos 3.000 detenidos, según el ministerio del Interior.
«Condenamos enérgicamente la violencia que se está produciendo contra los manifestantes y la detención de los partidarios de la oposición», agregó el jefe de la diplomacia estadounidense.
Cuestionó, igualmente, las interrupciones del servicio de internet para «obstaculizar la capacidad del pueblo bielorruso de compartir información sobre las elecciones y las manifestaciones».
Pompeo declaró que como amigos de Bielorrusia apoyan la «independencia y soberanía» de ese país, así como las aspiraciones del pueblo a un futuro democrático y próspero.
«Para lograr estos objetivos -puntualizó-, el Gobierno de Bielorrusia debe demostrar con hechos su compromiso con los procesos democráticos y el respeto de los derechos humanos». EFE