La importancia de un plan de viabilidad y la actitud del empresario en un proceso de crisis empresarial
Nadie puede poner en duda la catástrofe que está representado el 2020 para el tejido empresarial. Esta debacle propiciará un aumento notable en la cantidad de casos de empresarios que soliciten acogerse a la Ley Concursal con la que superar el concurso de acreedores que se prevé en sus organizaciones.
Se estima que los procesos de los concursos de acreedores se van a multiplicar por 4 en el 2021 en comparación con el pasado 2019. Esto significa que de los 4.464 casos del pasado año, se podrían superar fácilmente los 20.000 para el año que viene. Y esto es en el mejor de los escenarios, según afirma Igor Ochoa, CEO de Dipcom Corporate, asesoría líder en el apoyo a empresas para la gestión financiera, comercial, económica y operativa, y experta en la intervención ejecutiva para momentos de crisis de la compañía.
2021, un año decisivo para las empresas
Superar las crisis empresariales que ha producido sistemáticamente la aparición del coronavirus va a resultar una tarea ardua y complicada. Lograr que las compañías puedan recuperarse del estado de salud económico tan precario que está dejando el presente año tendrá su oportunidad en la llamada Ley Concursal, a la que podrá acceder en 2021.
Y es que, como norma general, la Ley Concursal contempla una moratoria para que la persona u organización que se encuentre en situación de deuda imposible de asumir presente un concurso voluntario desde que se declaró la actual situación de alarma hasta el 31 de diciembre del presente año.
Por este motivo, los empresarios están tomando la decisión de retrasar el procedimiento judicial, mientras buscan un plan de viabilidad, buscan financiación, reestructuran plantillas o esperan que la situación cambie de algún modo. En cualquier caso, la llegada del 2021 está destinada a convertirse en un auténtico enjambre de empresas en crisis en busca de una solución eficaz a su cierre.
Cómo afrontar una crisis empresarial
El empresario, al ver como inexorablemente se acerca una situación de grave crisis empresarial, tiene la opción de enfrentar con valentía este reto o dejarse hundir por las circunstancias. Evidentemente, la opción más lógica es la de observar la coyuntura como una situación que hay que superar, que no es el primero que se enfrenta a ella y que otros supieron y pudieron salir adelante.
Posiblemente, el empresario se encuentre en esa gran ola de concursos de acreedores que se espera para el 2021 en España. Para afrontarla con posibilidades de éxito, lo más aconsejable es contar con una empresa consultora experta en gestión de crisis como la mencionada al principio de este artículo; Dipcom Corporate con Igor Ochoa a la cabeza. Con una consultora como esta se podrá llevar a cabo una eficaz reestructuración de la empresa, gracias a su trabajo y su experiencia en el desarrollo e implantación de un plan de viabilidad eficaz.
En cualquier caso, quien debe soportar todo el peso de esta restructuración es el empresario, el cual debe utilizar esta situación para aprender y salir fortalecido. Con los siguientes consejos y la ayuda de los expertos, las oportunidades de sobrevivir con éxito a este tipo de situaciones serán mucho mayores.
Afrontar la situación
Se debe evitar, aunque sea la primera intención del empresario, formular pretextos o argumentar razones que afirmen que no son responsables de la situación, tampoco se deberá esconder el problema esperando que este se solucione solo, con un golpe de suerte.
Lo que se debe hacer en estos casos es afrontar directamente el problema, relacionarse con la crisis y asumir en toda su complejidad el asunto. Conocer el origen y comenzar a desarrollar un plan de salvamento.
Mente fría, cuerpo caliente
Nada de entrar en pánico que nubla la mente. Fuera enfados, temores, preocupaciones, tomar decisiones reactivas… Hay que mantener la calma, la mente fría y el cuerpo caliente, preparado para trabajar. El empresario ocupa una posición precisamente por su capacidad de afrontar retos, y es líder por infundir fe y compromiso, aunque la situación sea adversa. Crear equipo y creer que se puede solucionar el problema son otros de los pasos más importantes que se deben tomar.
Análisis de la situación
En un principio, las situaciones de crisis producen un entorno caótico, por definición crean una atmósfera llena de situaciones desconocidas y peligrosas, de desconocimiento, tanto en su origen como en su final. Ante toda esta situación extraordinaria, se debe llevar a cabo un proceso de análisis profundo, ni mentiras ni miedos, identificando el problema adaptativo, esto es, reconocer la necesidad de una transformación, ya sea en el propio empresario, en su equipo o en el sistema productivo y de gestión de la empresa.
Crisis es sinónimo de oportunidad
Eso es lo que cree al menos la sabiduría popular oriental. Y es que, la manera de interpretar el problema o la situación de crisis es, en buena medida, subjetiva. En este sentido, en lugar de mirar y analizar el problema desde un ángulo negativo, se tendrá que abandonar el estado de víctima, e intentar relacionarse con el problema como si este representara una oportunidad.