Dirigente chavista es brutalmente asesinado tras denunciar negocio del combustible y drogas: Barráez
José Carmelo Bislick Acosta era conocido como un dirigenet chavista en Guiria, estado Sucre y fue asesinado de manera brutal. Así lo denunció su hermana, Rosmery Bislick a Infobae, y aseveró que la indiferencia o desprecio del chavismo hacia su familiar, es notoria. El hombre habría denunciado el negocio del combustible y las drogas.
En exclusiva para Infobae, la mujer contó que «la Secretaria de Gobierno del estado Sucre se presentó al cementerio, pareciera con intensión de lavar culpas y servir de enlace entre los miembros de la alcaldía y el equipo donde Carmelo trabajaba, que se negaba a reunirse con el alcalde y sus directores de línea por pensar que ellos eran parte de este abominable hecho”.
Buscan explicaciones para el absurdo asesinato. “Sospechamos que fue por su crítica constante al tráfico de gasolina, su posición crítica dentro de la revolución. Ni nosotros, como su familia, ni su equipo de trabajo, encabezado por el diputado Román Rojas, nunca supimos de amenaza alguna”.
Bislick Acosta era profesor de educación física desde hace 23 años en el liceo “Dr. Domingo Badaracco Bermúdez”; fue concejal por 9 años, director del Ince, miembro del equipo Político Municipal del PSUV y parte del equipo asesor de los Comité Constituyente. Era coproductor y moderador del programa de radio “El pueblo en combate”.
El lunes 17 de agosto 2020, a las 11 y media de la noche, ninguna de las 7 personas que estaban ese día en una casa de la urbanización Villas de Guayacán conocían a los 4 hombres que, en menos de un par de horas, les marcaron la vida para siempre. “Usaban monos con capuchas, tipo suéter mangas largas, con gorras y telas como tapabocas”, eran muchachos aparentemente sin preparación alguna, “más bien enviados. Solo le dijeron que se había comido la luz y que lo iban a matar, que a eso habían ido. A un Carmelo, sin duda aterrado por la suerte que puede correr su familia, lo sacan de la habitación, lo amordazan y lo sujetan. “Su esposa estaba ahí mirando todo, mientras les suplicaba que no lo fueran a matar”.
La mañana del martes, cuando su hermana llegó al Cicpc de Guiria, ve allí al comisario Wilmer Cedeño. “Él me dice que encontraron el carro y el cuerpo sin vida de mi hermano. En ese momento acabó como nuestra tranquilidad”.
La familia denuncia que tras haber pasado más de una semana, no tienen protocolo de autopsia ni se ha podido levantar el certificado de defunción, no tienen ningún documento que certifique la muerte de Bislick Acosta.