13 muertos en estampida en discoteca en Perú en plena pandemia
120 personas asistieron a una fiesta clandestina en la discoteca Thomas en Lima, Perú; cuando ingresó la policía para detenerlos por violar las normas de confinamiento se generó una estampida donde fallecieron 12 mujeres y 1 hombre.
AP reportó que el sábado en la noches, los tapabocas y zapatos quedaron regados en la puerta destrozada del local nocturno, en lo que calificó como la primera gran tragedia durante la pandemia, al menos en Latinoamérica. «Se mezclan la escasa irresponsabilidad ciudadana y de los empresarios en cumplir las restricciones con la improvisada planificación de las autoridades para ejecutar el cumplimiento de la ley».
De los 120 asistentes, 26 estaban infectados con el nuevo coronavirus, luego que las autoridades sometieron a 23 detenidos y a los 13 fallecidos a pruebas de diagnóstico. Entre los arrestados, 15 arrojaron positivo a la presencia del virus, así como 11 de las víctimas fatales, según datos de la fiscalía.
Los asistentes escaparon por la única puerta que había en el segundo piso, lo que ocasionó una estampida en las escaleras de poco más de un metro de ancho que conectaban con el primer piso. La puerta del primer piso se abría hacia adentro y estaba cerrada, lo que provocó que decenas se aplastaran unos contra otros. No se sabe quién cerró la puerta de metal, pero el local tiene un sistema de cámaras de seguridad que al ser visualizados ayudarán a explicar parte de la tragedia.
Tras la estampida, decenas de policías que llegaron a reforzar a los 20 agentes que ejecutaban el operativo, abrieron la puerta a la fuerza, incluso empleando barras de metal y combas. La policía auxilió a varios asistentes que mostraban signos de asfixia. Videos difundidos por la prensa mostraron a diversas mujeres desmayadas y echadas en las tolvas de camionetas policiales.
“Tengo pena por los familiares… pero también cólera e indignación con los empresarios organizadores del evento”, dijo el presidente peruano Martín Vizcarra en una actividad pública en el sur del país. El mandatario exhortó a la fiscalía y a los jueces que sean drásticos en el uso de la ley.
Claudio Ramírez, funcionario del ministerio de Salud que dirigió los exámenes de diagnóstico a los detenidos, comentó que la fiesta “era un caldo de cultivo para la transmisión de esta enfermedad; había una carga viral porque era un ambiente cerrado”.
Franco Asensios, uno de los asistentes, relató a la emisora RPP que la policía llegó a las 9 de la noche del sábado. “Los tombos (policías) dijeron ‘bajen las mujeres’… la gente se alocó y comenzaron a bajar, y después dijeron que se estaban asfixiando la gente de adelante”, señaló.
Alejandro Ruiz, vigilante de la calle donde funcionaba el centro de fiestas, dijo a RPP que no era la primera vez en el mes que se realizaba fiestas en la discoteca Thomas. “La bulla se escuchaba a dos cuadras”, comentó el vigilante y añadió que cuando pasaba algún auto de la policía apagaban las luces y bajaban el volumen de la música.
El alcalde del distrito limeño Los Olivos, Felipe Castillo, dijo a la televisora local N que la discoteca se hallaba en su jurisdicción pero que vigilancia y fiscalización en las calles de su distrito son “precarias” debido a los efectos de la pandemia que han disminuido el cobro de impuestos. Desde mediados de agosto los peruanos tienen prohibido reunirse, incluso en citas familiares, por un estado de emergencia que limita varios derechos constitucionales para evitar contagios. Las autoridades también han prohibido salir los domingos debido a un alza en las infecciones.
Perú ha reportado unos 27.500 fallecimientos a causa del coronavirus.