Un encuentro con la costa carabobeña
Los municipios Juan José Mora y Puerto Cabello componen la costa carabobeña. Ambas localidades reúnen atractivos y potencialidades geográficas y económicas impresionantes. No obstante, la realidad es que su población no percibe que las promesas de bienestar y progreso se concreten en realidades. Para abordar la realidad de esos municipios conversé con Ervis Castillo, secretario de Asuntos Municipales de Puerto Cabello por AD, y con Raimundo Infante, Secretario de Asuntos Municipales de Juan José Mora por AD.
Al hablar con Ervis Castillo sobre Puerto Cabello me comenta: “Es difícil separar el municipio Puerto Cabello de su puerto. Es por allí que entra gran parte de los productos importados al país pero es innegable que el intercambio comercial se encuentra profundamente deprimido. Es obvio que, cuando se paraliza el Puerto se paraliza la economía carabobeña y ésta repercute , directamente a nivel nacional. El municipio Puerto Cabello se percibe deteriorado, como sin dolientes, con una gran anomia. El colectivo porteño se pregunta: ¿Qué pasó en estos últimos 20 años? ¿Es una pesadilla? la falta de inversión gubernamental es notoria y todos lo sufrimos diariamente. La infraestructura turística está descuidada y el gobierno local parece no entender que la industria turística se puede potenciar solo si hay trabajo conjunto entre el sector público y privado”.
El contexto actual complica las circunstancias de Puerto Cabello, según Castillo, “La cuarentena empeorará más la situación. Independientemente de la efectividad de esa medida sanitaria es imposible no notar que se agudizará más la escasez, el deterioro de los servicios básicos, la falta de alimentos y la crisis del transporte, esto último golpea diaria y gravemente a la población. El tema de los pensionados merece particular atención, los problema de los bancos, como la falta de efectivo, se ha convertido en una verdadera calamidad para los porteños. Otro de nuestros más graves problemas es el colapso total de la red de aguas negras en los barrios, en las comunidades y en las principales parroquias y la falla constante del agua potable, con decirte que hay tuberías que tienen muchos años, las cuales ya están oxidadas y se teme que se contaminen con las aguas servidas”.
Asimismo, Castillo me revela que recientemente las comunidades que visita denuncian “fallas en la distribución del gas doméstico y están cocinando con leña”, siendo Puerto Cabello la puerta de entrada comercial más importante del país, no hay forma de justificar lo que padece esa población.
Por su parte, Raimundo Infante me dio una evaluación de la preocupaciones de los ciudadanos de Juan José Mora. “Desde el punto de vista de la economía del municipio lo que más afecta a las familias es la inflación, debido a que mientras el salario mínimo está por el piso y en soberanos, la cesta básica está por las nubes y en dólares. En cuanto a los servicios públicos en nuestra comunidad tengo que reconocer que ninguno funciona o simplemente no cubren las necesidades de la colectividad, fíjate que el transporte no funciona. El agua llega cuando llueve y aquí ya ni llueve. Los ambulatorios no cuentan con nada y ya el personal de asistencia ni siquiera asiste a sus puestos de trabajo, las fallas de energía eléctrica es el que produce mayor daño a las familias morenses porque cada vez que se va la energía eléctrica cuando regresa llega con sobrecarga y esto produce cortos circuitos dejando consecuencias graves tales como quemas de neveras, aires acondicionados y televisores”.
Al interrogar a Raimundo Infante sobre cómo evalúa al gobierno local de Juan José Mora me explicó: “Si tomamos una escala del uno al diez para medir a este gobierno municipal, le daría 1 punto. ¿por qué? Porque Morón adolece de un gobierno municipal serio, responsable y que administre los recursos de la comunidad con criterio de progreso, con sentido humanitario y con el propósito de hacer de este un municipio de progreso. Tenemos mucho recursos humanos, técnico, tecnológicos y naturales pero sin sentido de orden, colaboración entre el sector público y privado, contacto real con la comunidad y transparencia administrativa poco podemos hacer. La democracia no es una quimera, es una forma de gobierno donde la alcaldía es un actor más entre otros actores que colaboran en un ambiente de respeto y coordinación, hoy Morón está lejos de ese ideal”.
Los ciudadanos de la costa merecen un mejor trato. Es difícil creer que ese mejor trato provenga de quienes por 20 años los han olvidado, aunque les coloquen una valla publicitaria cada dos metros diciendo Morón o Puerto Cabello “Te quiero”, esa forma de querer ya no convence. Espero que esta pequeña ventana siga sirviendo al pueblo costero para dar a conocer sus problemáticas.
@rockypolitica