Vicepresidenta del Parlamento Europeo pide prohibir comercio con el «oro de sangre» venezolano
La vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, envió una carta a Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, para que promueva la expansión de las sanciones de la UE al gobierno de Nicolás Maduro y evitar el comercio con el oro que es extraído de forma ilegal de las minas venezolanas.
La misiva, firmada 27 eurodiputados y enviada este martes, solicita a Borrell promover “activamente la expansión de las sanciones de la UE para incluir una prohibición del comercio y la circulación de oro de sangre ilegal venezolano en la Unión Europea, además de extender el lista de sanciones a otros funcionarios de alto nivel del régimen y sus familiares cercanos”.
“Si bien apoyamos plenamente el papel de la UE para impulsar el diálogo, el régimen ha demostrado una y otra vez que no tienen intención de renunciar a ningún poder o tomar el diálogo en serio en las condiciones actuales. Para asegurar que los futuros intentos de diálogo puedan tener éxito, debemos presionar al régimen, y la mejor herramienta para hacerlo es con sanciones. Las sanciones son la herramienta pacífica más fuerte que tenemos para influir en los países, y la efectividad de nuestras sanciones y la credibilidad de la UE como actor global están en juego”, dice la carta.
A continuación, la misiva completa:
Sr. Josep Borrell Fontelles
Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores
Vicepresidente de la Comisión Europea
Desde 2017, la UE ha tenido un conjunto de medidas de sanción dirigidas contra funcionarios de alto nivel del régimen de Maduro que son responsables de violaciones de derechos humanos y socavar la democracia en Venezuela. Estas sanciones incluyen un embargo de armas y equipos para la represión interna, y también congelamientos de activos y prohibiciones de viajes a personas.
Para que estas sanciones tengan un impacto más efectivo, el Parlamento Europeo ha pedido reiteradamente al Consejo que las amplíe para incluir a más personas y que las sanciones se extiendan a sus familiares. Los últimos ejemplos son las resoluciones votadas el 16 de enero de 2020 y el 18 de julio de 2019, respectivamente.
Tras la visita del Presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, a Bruselas, el 22 de enero de 2020, se reiteró la importancia de fortalecer las sanciones de la UE para presionar al régimen y lograr elecciones presidenciales libres y justas, incluso mediante la prohibición del comercio de oro venezolano.
El régimen de Nicolás Maduro ha estado recurriendo a la explotación de minas de oro para vender ilegalmente en el extranjero como una fuente crucial de ingresos para mantener al régimen ilegítimo en el poder. Este llamado «oro de sangre» se extrae y explota en condiciones ilegales y criminales que amenazan gravemente los derechos humanos y el medio ambiente, y le permite al régimen mantener el poder sobre el ejército a través de estos beneficios. Además, gran parte de ese oro se saca del país a través de canales irregulares para ser intercambiado en el extranjero por otras monedas para reemplazar el bolívar casi sin valor.
Esto se está haciendo sin beneficiar a los venezolanos, cada vez más empobrecidos, y que no son conscientes de los negocios realizados con la riqueza de su país. Por ello, Estados Unidos ha aplicado sanciones contra la industria del oro venezolana desde marzo de 2019.
Por lo tanto, los diputados abajo firmantes del Parlamento Europeo le pedimos al Alto Representante/ Vice Presidente, que promueva activamente la expansión de las sanciones de la UE para incluir una prohibición del comercio y la circulación de oro de sangre ilegal venezolano en la Unión Europea, además de extender el lista de sanciones a otros funcionarios de alto nivel del régimen y sus familiares cercanos.
Si bien apoyamos plenamente el papel de la UE para impulsar el diálogo, el régimen ha demostrado una y otra vez que no tienen intención de renunciar a ningún poder o tomar el diálogo en serio en las condiciones actuales. Para asegurar que los futuros intentos de diálogo puedan tener éxito, debemos presionar al régimen, y la mejor herramienta para hacerlo es con sanciones. Las sanciones son la herramienta pacífica más fuerte que tenemos para influir en los países, y la efectividad de nuestras sanciones y la credibilidad de la UE como actor global están en juego.