Rohaní dice que su gobierno fue franco y actuó sin demora
El presidente de Irán, Hasán Rohaní, defendió este miércoles la respuesta de su gobierno al brote de coronavirus, ante las críticas generalizadas de que las autoridades actuaron demasiado despacio e incluso podrían haber ocultado los primeros casos antes de que el virus se propagara con rapidez por todo el país.
Irán es el país más afectado de la región con casi 1.000 muertos, y casi un 90% de los más de 18.000 casos confirmados de Oriente Medio. Su gobierno anunció el martes que “millones” de personas podrían morir en el país si la gente sigue viajando e ignorando las recomendaciones médicas.
En un discurso a su gabinete, Ruhani dijo que el gobierno había sido “franco” con el país, afirmando que anunciaron el brote en cuanto supieron de él, el 19 de febrero.
“Hablamos a la gente de forma honesta. No tuvimos una demora”, añadió.
El gobierno ha sido muy criticado por una gestión considerada como lenta e inadecuada. Durante semanas, el gobierno suplicó a los clérigos que cerrasen abarrotados santuarios para contener los contagios. Finalmente, el gobierno los cerró esta semana.
“Por supuesto, fue difícil cerrar las mezquitas y lugares sagrados, pero lo hicimos. Hacerlo era un deber religioso”, dijo Rohaní.
El brote ha arrojado una sombra sobre las celebraciones del Año Nuevo Persa, Nowruz, que suele ser un feriado alegre que comienza el viernes. Las autoridades sanitarias han instado a la gente a evitar los viajes y lugares abarrotados, pero muchos parecían estar ignorando las advertencias, aumentando el riesgo a nuevos focos de infección.
Algunos mercados de alimentación en la capital, Teherán, seguían abarrotados el miércoles, y las autopistas estaban llenas de autos mientras las familias viajaban entre ciudades. Irán anunció que cerraría las mezquitas para las oraciones del viernes por tercer semana consecutiva.
Con información de AP.