Según investigaciones de la Universidad de Agricultura del sur de China, el pangolín fue identificado como un posible “huésped intermedio” que pudo haber facilitado la transmisión del virus.
Un animal que alberga el virus sin estar enfermo y puede transmitirlo a otras especies se llama reservorio. En el caso del nuevo coronavirus se trata probablemente del murciélago. Según un estudio reciente, los genomas de este virus y los que circulan en este animal son idénticos en un 96%.
Pero el virus del murciélago no puede fijarse en los humanos receptores y debe sin duda pasar por otra especie para adaptarse al hombre, lo que se llama “huésped intermedio”.
Después de haber estudiado 1.000 muestras de animales salvajes, los científicos determinaron que los genomas de las secuencias de virus estudiadas en el pangolín eran en un 99% idénticos a los de los pacientes infectados por el coronavirus de Wuhan.
Este nuevo virus apareció en diciembre en un mercado de la ciudad china de Wuhan, en el centro del país, donde se venden muchos animales, algunos de ellos salvajes.
China anunció a finales de enero y con el fin de contener la epidemia, una prohibición temporal del comercio de animales salvajes. Durante un tiempo aún indeterminado estarán prohibidos la cría, transporte y venta de todas las especies salvajes.
Con información de la AFP.