Fanny y su hija, las otras 2 víctimas de el gordo Matías: Crónica Uno
Celimar Linares, sobrina de Fanny, explicó que lo último que se supo de su tía fue cuando dio a luz a María en la Cruz Roja de Maracay. No obstante, el gordo Matías, quien las mantuvo en cautiverio por 23 años, pagó para que no dejaran entrar a nadie a la sala, según reseña Cronica Uno.
Cuando la madre de Fanny se plantó frente a su hija no la reconoció inmediatamente. Solo el lunar de su cuello le confirmó que 23 años después la volvía a ver. “Tranquila mamá, tranquila que ya estoy aquí y no me van a volver a alejar de ti”, le dijo lentamente para calmar su llanto.
La piel pálida de Fanny no se parece en nada a la de aquella adolescente que dejó su casa el 23 de septiembre de 1997, 10 días antes cumplir la mayoría de edad. Se iba a vivir con su novio: Matías Enrique Salazar Moure, de 32 años.
Durante 23 años “el gordo Matías”, como le decían los vecinos del Conjunto Residencial Los Mangos, en Maracay (Aragua), la encerró en un apartamento del piso 4 en la torre D. Su hija, María*, nació y creció en cautiverio.