Trump respondió con silencio al pedido de Pakistán de no iniciar una guerra con Irán
Davos (Suiza), 22 ene (EFE).- El silencio fue la respuesta que dio el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al primer ministro de Pakistán, Imran Khan, cuando éste le advirtió en una reunión privada sobre las consecuencias desastrosas que tendría entrar en un conflicto con Irán.
«Le dije que sería un desastre, sería insano, cuando ni siquiera el conflicto en Afganistán (vecino de Irán) está resuelto… y lo de Irán sería todavía más grande», dijo Khan en su intervención principal en el Foro Económico Mundial de Davos.
Khan fue uno de los contados gobernantes que tuvieron la oportunidad de reunirse con Trump, quien concentró su atención en encuentros relacionados con la situación en Oriente Medio, por lo que se reunió con el presidente de Irán, Barhan Salih, y del gobierno regional del Kurdistán, Nechirvan Barzani.
«No entiendo a los países que intentan resolver sus diferencias mediante conflictos armados porque cuando uno empieza nunca se sabe hasta donde llegará», reflexionó el jefe del Ejecutivo de Pakistán, que al mismo tiempo atraviesa un periodo de extrema tensión con India, con algunas escaramuzas en la frontera.
La situación se ha agravado cuando el pasado junio, cuando India decidió retirar la autonomía de la que gozaba la región de Cachemira, donde también lanzó una represión contra activistas y políticos locales.
Aumenta el nivel de riesgo el hecho de que tanto Pakistán como India cuenten con la bomba nuclear.
Mientras tanto, el Gobierno de Khan ha intentado ejercer de mediador entre Arabía Saudí y EEUU, por un lado, e Irán del otro, aprovechando las buenas relaciones que tiene con unos y otros.
«Un conflicto entre EEUU y sus aliados, e Irán, sería terrible para todos, los precios del petróleo subirían, la pobreza aumentaría y nadie sabe cuánto podría durar», comentó el primer ministro, que sostuvo que su país ha entrado recientemente en un camino de recuperación de la economía y de mayor seguridad.
Las inversiones extranjeras directas en Pakistán aumentaron casi un 20 % el año pasado, que además fue el más seguro desde 2011, año a partir del cual la situación se deterioró debido a la alianza que el Gobierno paquistaní de ese entonces decidió sellar con EEUU para luchar contra Al Qaeda. EFE