Invitación a Brian para tour socialista siglo XXI
Querido Brian:
Con mucho gusto recibí tu llamada desde Oxford informando de tu estancia en la chamuscada y calurosa Australia, a donde fuiste para ver la idiosincrásica piedra Uluru; lamento todos los sinsabores de este viaje de sólo 16 horas en avión más las largas polvorientas horas en jeep para llegar a la roca tan venerada por los nativos.
Conozco tu pasión de explorador británico que tuvo que ser auxiliado en Nepal por falta de oxígeno, contemplador de tortugas gigantes en los Galápagos, y de otros tantos viajes en los que la aventura te seduce. Conozco también tu frustración por no poder venir a contemplar pájaros y caimanes en el confiscado Hato Piñero, así como el cancelado viaje para -caminado por la selva guayanesa -. llegar al pie del Salto Ángel. Fin de resarcirte esos fallidos viajes a tu segunda patria.
Te propongo un tour verdaderamente de aventura para que disfrutes del socialismo del siglo XXI.
1. Visita al Cuartel de la Montaña, recuerda no llevar móvil ni cámara fotográfica y menos celular, corres el riesgo de que regreses a Oxford sin ellos.
2. Participación en una cola de jubilados intentando cobrar su pensión, trae silla portátil y agua mineral británica.
3. Viaje rememorando las aventuras de tu paisano Walter Raleigh a Guayana en busca de El Dorado. Como buen venezolanista que eres, recuerda que: en carta del Gobernador de Santo Domingo al rey Felipe II se informa que Raleigh remontó el Orinoco hasta las confluencias con el Caroní, y luego exploró este último río hasta los saltos y raudales donde se hallaba asentada la comunidad del cacique Morequito, con la que pudo entenderse e intercambiar regalos. Explorando la zona, Raleigh descubrió algunas minas de estaño y emprendió la vuelta cuando ya no pudo seguir avanzando con sus barcos por aquellos ríos. Puedes visitar el Arco Minero, con guardaespaldas, vacunado contra la malaria y el paludismo. Hasta un lingotito de oro bolivariano te puedes llevar de suvenir.
4. No se te ocurra venir con tu pana pelirrojo, el hijo de Diana. Tú pasas por venezolano sin problemas, pero en lo que las bandas especializadas en secuestros se enteren de la presencia de tan distinguidos visitantes, ambos corren un gran riesgo. Como están las cosas por allá no sé si la Casa Real quiera pagar el rescate.
5. No traigas libras esterlinas. Acá todo se negocia con el sucio dólar americano, y el euro y la libra te lo cotizan igual al verde. Trae, sí, linternas, tus medicinas, seguro médico internacional porsí. Lo demás lo consigues todo acá, eso sí más caro que en Sainsbury’s.
6. A lo mejor los invitan a echar un pie en Palacio, pero sé que la salsa brava no te gusta, ni la tambora, sino la gaita escocesa por razones de sangre y linaje. Ni de vaina se te ocurra traer una falda de esas de cuadritos. Te tengo CD con las canciones y poemas favoritos del Comandante Eterno.