Contradicciones pecaminosas
En Venezuela las razones para protestar son prolijas. Por eso la seguidilla de insurrecciones en barrios y urbanizaciones son continuas, diría que permanentes. Nuestro rico país, devenido en un ejemplo de como las malas prácticas gubernamentales pueden hundir a una Nación próspera en la más escalofriante miseria, está expuesto en la vitrina del mundo y a él, echan mano conferencistas de todas las corrientes del pensamiento, al igual que catedráticos, planificadores, asesores bursátiles y aspirantes a presidentes en cualquier parte del mundo para fundamentar sus recetas con las pócimas recomendadas, para que catástrofes como la venezolana, no se reciclen. Dicho de otra manera: qué es lo que no se debe hacer para arruinar a una sociedad.
A la hora que escribo estas líneas se están consumando en mi país un rosario de quejas por distintas motivaciones. Cualquier persona interesada en saber qué pasa en el país rico en petróleo, en oro, diamantes, gas, hierro, aluminio, bauxita, etc, le bastará con meterse en cualquier portal de noticias que tienen en servicio las redes sociales y así, en un santiamén, se pondrá al día de los verdaderos dramas relatados por sus víctimas. No estamos hablando de datos estadísticos ni de versiones de analistas o de crónicas interesadas de algún medio de comunicación o activista político. No. Leerá aquí una recopilación de los testimonios de personas que cuando van a un hospital que integra la red de centros de salud del estado Mérida, como Joan Manuel Gómez, se percatan que, desde los entes controlados por la dictadura venezolana, como MERCAL, se despacharon 8.200 kilos de carne descompuesta. Eso no fue ni en Chile ni en Bogotá, fue aquí, en la zona andina venezolana, en donde han podido morir decenas de seres humanos en las poblaciones de Tovar, Bailadores, Santa Cruz, El Vigía, Lagunillas y Tucani.
En otro centro de salud, pero esta vez ubicado en el litoral guaireño, vecino a Caracas, el hospital José María Vargas, familiares de pacientes denuncian que los baños son un asco de donde salen malos olores de heces y orina, dicen que tampoco hay agua potable, ni insumos simples para atender como Dios manda a los pacientes. Así lo expuso la ciudadana Marisol Pérez.
De la salud pasamos a la educación, para enterarnos que, las escuelas adscritas a los planes de Fe y Alegría, han perdido más del 25% del personal docente en lo que va del año en curso. ¿las razones? Los paupérrimos salarios, la inseguridad y el pésimo estado de las plantas físicas de las instituciones educativas. Todo eso lo narró la profesora Noelbis Aguilar, directora nacional de esos programas.
Ahora tenemos el hecho insólito -recordemos, somos ricos en gas- que, en la ciudad de La Fría, estado Táchira, en doce comunidades del sector Ayacucho, los vecinos madrugaron en La Blanca para exigir suministro de gas doméstico, así lo dio a conocer a través de su twitter @Daniperiodismo, la comunicadora Daniela Glez.
La sangre de las masacres no faltará en estos partes de guerra en los que está sumido nuestro país. La última es la que recoge los datos ciertos de los seis indígenas pertenecientes a la población Ikabarú en el estado Bolívar. Las mafias que se pelean por el control de las minas que explotan a sus anchas, con la venia de la dictadura, se llevan el oro y los diamantes, pero al mismo tiempo algo más valioso, la vida de esos hermanos del pueblo Pemón.
Ahora bien, nos consta que en todos esos escenarios la pregunta que no falta es aquella que busca una respuesta que explique ¿Cómo es posible que el dictador Maduro siga usurpando el poder? También cuesta entender que las protestas en Colombia resulten de una combustión espontánea para tratar de descartar “las manos peludas” de los operadores del Foro de Sao Paulo. El Presidente Duque apenas acumula un año y semanas al frente del palacio de Nariño, heredó la violencia que patrocinan las bandas del narcotráfico y el malestar que potenció las reformas tributarias de su antecesor, sin embargo, los jefes políticos que auspician esas protestas en Colombia, le reclaman soluciones al Presidente Duque, mientras que a Maduro, que junto a Chávez suma más de 20 años con todos los poderes a sus pies y manejando petrodólares en cuantías inimaginables, le mandan palabras de solidaridad porque según ellos “es víctima de la injerencia del imperio yanqui”. ¡Impostores!